viernes, 8 de mayo de 2015

Descubrir Líbano en una semana


El Líbano sorprende. La idea preconcebida de este país árabe se rompe en cuanto posas los pies en su capital Beirut y empiezas a pasear por sus calles llenas de comercios, restaurantes estilo occidental y bares repletos de estudiantes europeos y de libaneses de piel blanca y ojos verdes. 
País árabe en el que pasas desapercibido porque los que te rodean se parecen físicamente a ti, porque no hay rastro en Beirut de esa idea del árabe tapado y conservador. En Beirut hay más de 20 universidades y eso se nota en el ambiente, en sus costumbres y en la diversión de esta ciudad.

Centro de Beirut

La roca de las palomas. Beirut


Zona reconstruida en Beirut



La corniche. Beirut

Me decían que los libaneses era un pueblo de supervivencia y superación y eso percibí. 
En los años 90 Líbano estaba inmerso en una guerra civil y Beirut quedó destruida. Pero en pocos años han hecho una nueva ciudad, la zona centro está completamente reconstruida y aunque en algunos edificios todavía quedan las marcas de las balas, la ciudad de alza impotente y con fuerza sin importarle su pasado. Eso es, un ave fénix. 

De nuevo buscando ruinas romanas por el mundo llegué a el Líbano. Baalbeck una ciudad fenicia, griega y romana sorprendente por las grandes piedras de sus templos. Declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.



Baalbeck



Baalbeck





Biblos una ciudad fenicia situada en la costa norte. Es una de las ciudades más antiguas habitada ininterrumpidamente.


Biblos y el mediterráneo



Ruinas de Biblos



Nuestra ruta fue:

Día 1: Llegada al aeropuerto a las 2.15 de la mañana.El taxi desde el aeropuerto puede costar regateando unos 10 dólares Hotel Cederland. Zona centro de Hamra. 52 dólares. 

Día 2: Salida a ver Beitedinne. Castillo a 45 kilómetros al sur Beirut. 

Día 3: Salida de Beirut al sur, visitar el pueblo de Sidón (Saida en árabe), está a 48 kilómetros, se tarde una hora y puede costar unos 750 liras, terminal de autobuses de Cola. Se puede ver por la mañana y luego coger bus para ir a la ciudad de Tiro a 40 kilómetros de Sidón. Noche en Sidón. 

Día 4: Regreso Beirut, no hay otra posibilidad. Y en Beirut coger desde la estación Charles Helou minibus a Biblos (jbail) cuesta 2.000 liras, está a 37 kilómetros y se tarda 40 minutos, es el bus que va a Trípoli. Dormir en Biblos. 

Día 5: Desde Biblos ir al Valle de Qadisha y quedarnos en la ciudad de Bcharre. Cerca está la reserva natural de los cedros. Para ir a verlos coger taxi, unos 20 dolares todo el día. Hay que ver si esta zona está nevada porque cortan las carreteras. 

Día 6: Ir a Baalbeck en excursión de 1 día y regreso a Beirut. Se tarda 2 horas. 

Día 7: Beirut todo el día.



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